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El derecho a la discriminación selectiva

El racismo y los resentimientos raciales así como las memorias de los abusos lejanos a los que fueron sometidos unos por otros, persisten en Cuba y en todas partes donde haya una significativa población de distinto color que pueda representar una competencia para la otra parte. Esto es que en un país como Haití donde hay muy pocos blancos, al menos los negros no son racistas ni se sienten competidos y explotados por los blancos, aunque si son discriminados y explotados por la clase negra pudiente; lo mismo sucede en un país como Suecia, donde hay tan pocos negros, que los pocos que hay se vuelven como algo exótico y atractivo, lo que los hace sentirse como reyes; también los negros que se establecen en China experimentan favorables sensaciones: tan pronto ponen un pie en ese país, cientos de jóvenes chinas los quieren para ellas; las mismas que nunca antes se le insinuaron a un compatriota chino, se vuelven sumamente agresivas sexualmente cuando se trata de un negro. Entonces ¿por que existe el racismo? Por que más que racistas somos muy hipócritas y simuladores hasta con nuestras imágenes (como esas fotos fabricadas con la que se algunos venden con cara de persona buena, amorosa y comprensiva). Y mientras nosotros no nos atrevamos a hablar con la verdad, nada va a cambiar. Necesitamos tener libertad para hablar libremente de cualquier tema. Y no solo tratando sobre el tema sino que hablando claramente sobre lo que nosotros pensamos de unos y otros como causa para segregarnos. O sea, que si nosotros creemos que la “obsesión” de los negros por las mujeres de color claro es un asunto que tiene que ver con la forma discriminatoria en la que ellos mismos y demás razas ven a sus propias negras, pues eso debemos de decirlo sin tapujo. Por otra parte si creemos que el rechazo, la inconformidad ó la resignación con que unos padres blancos acepten que uno de sus hijos (especialmente si es hembra, por cuanto ella será la que reproducirá) se una en vida conyugar a un negro, ello no es necesariamente el resultado de un problema racista sino que más bien pudiera tratarse de un problema de prejuicios válidos por cuestiones de imagen. O sea, que siempre existe el temor de ligarse con personas ó familias poco educadas, chusmas, vulgares, carentes de imaginación y disciplina para salir adelante, feas por dentro y por fuera, escandalosas en muchos de los casos e hilarantes con la música a alto volumen. Todo esto naturalmente preocupa a las personas, sin importar de que raza sea el pretendiente ó la persona que haya sido “escogida” (de ser libres para escoger, todos escogeríamos lo mejor de lo que viéramos, por lo que difícilmente nuestras parejas hubieran sido las que son; por lo general nadie escoge, sino que en un momento determinado tomamos lo que se nos da) por nuestros hijos. El rechazo a la chusmeria y a la fealdad, no tiene nada que ver con racismo. Más si en proporción esto se nota más en unas razas que en otras, viéndose que hay más delincuentes y provocadores entre los negros que entre otras razas; que hay mas feos entre los negros que entre otras razas; que hay más chusmas entre los negros que entre otras razas; que hay más gente con problemas de superación entre los negros que entre otras razas, mientras que también hay mejores deportistas entre los negros que entre otras razas, así como mejores músicos y cantantes, pues se llega a pensar que nuestra discriminación es racial, cuando en realidad no lo es, sino que se trata de una discriminación natural que siempre aplicamos diariamente, lo mismo cando seleccionamos a la reina del carnaval, teniéndonos que ver forzados a discriminar según la edad así como también según su peso y apariencia, también la discriminación la aplicamos especialmente cuando que se trata de elegir a alguien para entrar en el partido ó para ocupar un cargo dentro de él; si la persona tiene apariencia de chabacana, no importa que tenga otras buenas cualidades, a esta no se le dará entrada en el partido. Todo esto dicho es para decir que lo natural es que en todo existe la discriminación, hasta en elegir los artículos que uno va a comprar, sean frutas y vegetales y hasta carnes, se aplica la discriminación. Entonces sí es natural también que uno tema por el futuro de sus hijos y de sus posibles nietos. Nadie quiere enterarse que su hijo ó hija se unió a alguien proveniente de una familia “barata”. Y mientras más uno esté obligado a preservar una imagen para con los demás, más exigente se es en este caso. O sea, que no es por casualidad que los hijos de los dirigentes cubanos siempre tengan la suerte de casarse con extranjeros acomodados ó con nacionales digamos “con suerte”, de manera que ninguno de ello les ha traído a casa una familia vulgar de las que tengan que avergonzarse.
 Notamos que en los EE.UU la competencia entre las razas, pero especialmente la protagonizada por los negros en busca de valorizarse ante los blancos, es una situación que no necesariamente radica en que fueron discriminados y abusados por los últimos durante un largo tiempo, sino que radica en que son de diferentes apariencias.  Por lo que ni aunque pasaran cinco mil años los negros se olvidaran de que fueron esclavizados, aun cuando en realidad solo fue una insignificante cantidad de ellos la que fue sacada de África para con esos fines. De manera que si bien otros pueblos pronto se olvidaron de que fueron esclavos y semiesclavos de naciones conquistadoras, e incluso de sus propios gobernantes y connacionales como en el caso de chinos, hindúes, y otros que se esclavizaban entre ellos mismos; algo de lo que hace mucho que dejaron de tener memorias y resentimientos aun cuando no ha pasado tanto tiempo desde que sucedía, lo que si es seguro es que mientras existan negros y se sientan feos y despreciados, ellos no se olvidaran del pasado ante un presente que los desvaloriza.
 Yo particularmente me atrevo a decir que creo que la inmensa mayoría de las negras son feas y poco atractivas; algo que también parece que los negros piensan de sus negras; de ahí que si cada negro pudiera conseguirse a una blanca ó a una china, ya hace mucho que no existirían como raza, pues ningún negro iba a decir “yo no”. De manera que no necesariamente se trata de que los negros tengan una gran preferencia por las blancas y las chinas, sino que como todo el mundo, ellos también tienen preferencia por las mujeres bonitas y atractivas, y como del lado de las ultimas es donde se localizan las mas de estas, pues ello pudiera hacer pensar que prefieren a las hembras de otras razas, cuando en realidad estos simplemente se dejan llevar por las mismas preferencias de todo el mundo.

Tenemos que atrevernos a decirnos lo que no nos gusta de unos u otros; lo que pensamos de unos y otros. Solo así podremos liberarnos del racismo e integrarnos en un mismo grupo humano… cuando arreglemos las cosas para que nos aceptemos y podamos convivir como un solo pueblo. De manera que si creemos que los negros creen que ellos son feos, pues debemos de buscar embellecernos evitando traer fealdad al mundo, por lo que tendríamos que animarnos a buscar lo mejor de los mejores de nosotros para reproducirnos. Esto es que los blancos han de reclamarle a los mejores negros del mundo (no a los de Cuba solamente) su esperma para así crear hombres y mujeres mas fuertes y bellos. Mientras que los negros han de reclamarle a los blancos y a los chinos su esperma para crear también mejores mujeres y hombres, corrigiendo nuestros defectos físicos con lo que otros tienen.

El asunto del racismo no se puede resolver con hipocresías y simulaciones como las que se practican en los EE.UU. Por el contrario: cada vez crecen más los resentimientos que son generados por una sociedad competidora entre sí mismos. Así, el acaparamiento por los negros y negras de los trabajos en las oficinas del gobierno en EE.UU (correo, escuelas públicas, centros de salud, etc.) crea muchos resentimientos que son imperdonables, ya que los blancos fueron los que les dieron acceso primero, mientras que ellos se lo cogieron todo en cuanto escalaron en el mando., notándose con gran frecuencia que en cuanto un negro ocupa un puesto de poder en una empresa, inmediatamente despide a los blancos, reemplazándolos con negros amigos ó familiares, lo que genera un gran disgusto entre la población blanca. No es empujando a los negros y negras a escalar en posiciones de dirección y en mejores puestos de trabajo (lo que se ha venido haciendo en los EE.UU desde hace unos treinta años con la llamada ley afirmativa), discriminando en contra de los blancos para darle mejores oportunidades a los primeros, el como se va a conseguir ser más justo con todos. El estado no se debería de arriesgar a un paso como este que generaría gran oportunismo y se volvería incontrolable.

Digámonos lo que pensamos unos de los otros y tratemos de resolverlo con amor; no con conflictos y odios. Busquemos hacer una revolución en la que sublimemos el embellecimiento y mejoramiento humano a partir de escoger mejores ejemplos humanos para con la procreación, estimulando a la mujer a que idealice sobre el hijo que ella quisiera tener, recurriendo a bancos de esperma para escoger a su fertilizador, y así intentar traer al mundo la belleza que todos queremos.

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